* El presidente municipal José Christian Buendía Andrade entregó un Rotoplas a cada familia.
El sábado 17 del presente mes, el presidente municipal de Pacula, licenciado José Christian Buendía Andrade, llevó esperanza de bienestar a la comunidad de San Francisco al hacer presente la Casa del Pueblo con todos los servicios públicos que dependen de la administración municipal, y a su vez entregar un tanque Rotoplas a cada familia de esa localidad.
La acción hizo honor al nombre del programa de gobierno “Caravanas de la Esperanza”. No lo digo yo: así lo expresaron mis entrevistados, entre ellos el delegado Noé Espino Gutiérrez y los señores Darío Andrade Gutiérrez, Gerardo Andrade Trejo, Leonel Trejo Andrade y Nicasio Andrade Chávez, así como muchas otras personas, hombres y mujeres, que recibieron el beneficio de manos del presidente municipal, su secretario particular, Lic. Samuel Oswaldo Lara Pérez, y la síndico municipal María Guadalupe Fraile del Valle, entre otros funcionarios municipales que cumplieron con sus comisiones respectivas.
En esta comunidad se carece del vital líquido. Donde desde hace al menos cinco años las lluvias han sido insuficientes y las ollas de almacenamiento con las que cuentan se encuentran sin gota alguna.
El presidente municipal reconoció que un Rotoplas no soluciona la escasez de agua, pero el beneficio permitirá que las familias cuenten con un recipiente adecuado para almacenar el líquido, ya sea cuando puedan adquirir un viaje de agua, o mientras el gobierno municipal realiza gestiones ante el gobierno estatal y federal, en el marco del Plan Hídrico Nacional, para llevar agua a las comunidades más alejadas de Pacula.
Las Caravanas de la Esperanza se vieron enaltecidas por la anfitrionía de las autoridades de San Francisco y la presencia de los regidores del pueblo: Manuel Lugo Lugo, Óscar Gutiérrez Trejo, Brisa Lizeth Noche Martínez, Blanca Estela García Reséndiz, Honorato Mejorada Cruz y Yareni Trejo Andrade. También estuvieron presentes directores y directoras de distintas áreas municipales, quienes ofrecieron audiencias personalizadas y realizaron diversos trámites y servicios como pagos de impuesto predial, atención médica, registro civil y asesoría legal.
De acuerdo con los entrevistados, esta caravana logró su objetivo de acercar el gobierno al pueblo, ahorrándoles al menos 200 pesos en gastos de traslado a la cabecera municipal para realizar los trámites mencionados. Uno de ellos comentó: “Por lo menos en esta administración, si vas a la presidencia municipal encuentras abierto y alguien que te atienda”. En ocasiones anteriores, gastaban y no encontraban oficinas abiertas, ni personal disponible.
El presidente municipal reiteró su compromiso con la justicia social, la transformación y una administración digna y austera, destacando que con esta visión se podrá ejecutar una obra emblemática de 20 millones de pesos para atender la necesidad básica de agua potable.
Algunos ciudadanos entrevistados expresaron: “Le damos gracias al presidente Christian Buendía y a Dios, y le pedimos que nos siga apoyando”.
Sin duda, Las Caravanas de la Esperanza se posicionan como un referente de cómo ejercer la administración pública en estos “nuevos tiempos”. Las comunidades de Jiliapan y San Francisco son prueba de ello, y seguramente las próximas caravanas, a realizarse este viernes y sábado, continuarán mejorando tras una reunión entre directivos, regidores y el presidente, con el objetivo de identificar fortalezas, oportunidades, debilidades y retos.
Es digno de reconocimiento el trabajo, la humildad y la disposición de los miembros de la Casa del Pueblo, quienes, con entusiasmo, transportaron los Rotoplas, en apoyo a jefes y jefas de familia, en su mayoría personas adultas mayores.
