Jessenia Villeda Ponce, de 23 años de edad y originaria de Zimapán, inició su historia de emprendimiento después de culminar su bachillerato, tiempo en el que estuvo a unos pasos de estudiar la carrera de Médico Veterinario Zootecnista, sin embargo, a tiempo se dió cuenta que no era a lo que quería dedicarse, y simplemente se le presentó la oportunidad de tomar otra opción de superación para su vida.
Recuerda haber visto una publicación en Facebook sobre una escuela de cosmetología, así es que decidió cursar la carrera con duración de un año y cuatro meses, cuyo costo ella misma solventó con el producto de su trabajo en un negocio de bienes raíces.
En el 2020, un hermano de ella le dió la oportunidad de ocupar una oficina para que comenzará a trabajar las técnicas que había aprendido como manicurista. Durante el primer año avanzó poco, incluso meses en los que sólo tuvo 3 clientas.
No obstante, para ella fue un reto seguir adelante, acondicionó su centro de trabajo en el que estuvo tres años, con jornadas de hasta casi 14 horas al día, lo que representó para ella una gran experiencia y el empuje que necesitaba para salir de su zona de confort.
Posterior a esos tres años, planeó lo que sería su nuevo establecimiento, decidida a integrar a más personas al proyecto, contando como prospectos a sus propias compañeras de cursos y certificaciones.
Empezó a comprar mobiliario con los ahorros que había logrado, a concretar un convenio de arrendamiento y pensar en otros aspectos importantes para su nueva etapa de empresaria.
Al principio fue muy fácil, explica Jessenia, contaba con el apoyo de sus padres y familiares, pero la siguiente etapa fue de grandes sorpresas. Vino la etapa de hacerse cargo de diversos pagos, como renta, luz y ayudantía.
Una ventaja en su negocio fue iniciar en diciembre, tiempo de mucha demanda de los servicios que ofrece, lo que le permitió obtener muy buenos ingresos, y esto a su vez a superar esa racha de adaptación, en el cual se consolidó el negocio.
Actualmente, Jessenia Villeda Ponce tiene un negocio conocido en el centro de Zimapán, cuenta con dos colaboradoras que también tienen formación en el mundo de la belleza, por lo que comparte su experiencia a todas aquellas mujeres que desean emprender algún negocio. «Que nada las detenga, que den todo por lo que les apasiona».